Fuente: www.ticbeat.com

La tecnología está transformando las finanzas a una gran velocidad. Cuando la disrupción del sector FinTech comenzaba a tomar forma, las preguntas que todo el mundo se hacía eran ¿qué es? o ¿para qué sirve?. El siguiente paso fue el de entender el FinTech como un enemigo del sector bancario tradicional. 

Poniendo una analogía con el baseball, el FinTech está robando bases a un ritmo vertiginoso y su ‘home run’ particular puede ser el establecimiento de una larga amistad con el sector bancario tradicional, que puede actuar a modo de garantía y transmitir una imagen de seguridad sobre productos y servicios innovadores que irrumpen con fuerza en el mercado.

El Ecosistema del sector FinTech

En Finanzas, en Economía y en la Naturaleza, en general, el equilibrio se logra con un ecosistema diverso, en el que hay depredadores, herbívoros y omnívoros. Cuando hablamos de “Ecosistema FinTech” no debemos aludir a las empresas que habitan en él (eso es un mapa), sino a los diferentes tipos de corporaciones, cómo son y a qué se dedican.

El ecosistema del sector FinTech está formado por:

  • Bancos digitales puros
    Aquellas compañías que llevan el FinTech en su ADN, no hay cajeros, no hay sucursales, tan solo una App, una página web y un servicio de atención al cliente para atender a los consumidores en caso de que tengan algunas dudas. Podemos ver ejemplos de compañías como Atom Bank o Number 26 en este campo.
  • Empresas FinTech nativas
    Al igual que en el punto anterior, dentro del ámbito de las finanzas tecnológicas han nacido multitud de empresas que ofrecen productos de ahorro, inversión o financiación.
  • Bancos tradicionales que quieren transformarse
    “En la lucha contra la realidad, el hombre tiene sólo un arma: la imaginación.” T.Gautier. La banca tradicional ha visto como la disrupción del sector FinTech es una realidad, que los “players” operan en un sector (el financiero) que se transforma tan rápido como la tecnología. La necesidad agudiza el ingenio y en caso de que las ideas escaseen, copiar la estrategia que funciona puede ser una buena alternativa.Ya hemos visto los primeros anuncios de los grandes bancos cerrando sucursales, lanzando aplicaciones móviles e intentando iniciar una transición hacia la banca digital. El problema, tal vez, es que en un primer momento, infravaloraron a los competidores (que operan en el sector FinTech) que basan su estrategia en ofrecer al cliente el producto o servicio financiero que necesita. ¿Si hay un nuevo producto o servicio que cubre necesidades no cubiertas hasta ahora, quién no lo compraría?
  • Empresas fintech integradas en bancos: por colaboración o adquisición.
    Como decía Picasso, “los grandes artistas copian, los genios roban”. Precisamente en este punto es donde los bancos pueden iniciar una larga amistad con las empresas FinTech. Parten de un punto de desventaja, las FinTech empezaron la carrera hace ya tiempo y se mueven más rápido que los gigantes bancos. A las entidades bancarias consolidadas, les resulta más difícil crear algo innovador en el sector FinTech que directamente comprarlo.Esta es la razón por la que cada vez veremos más empresas FinTech operando como lo hacían antes, pero integradas en Bancos. Esa integración será total. El consumidor cuando acceda a la web, podrá ver el nombre de su banco con una cartera de productos y servicios diversificada de diferentes empresas FinTech (que han sido adquiridas o tienen un acuerdo de colaboración con la entidad bancaria).